Este sagrario fue el primer encargo que Pedro Salazar de Mendoza, administrador del Hospital de San Juan Bautista, hizo a El Greco en 1595. Se trata de una custodia o tabernáculo en forma de templete que adorna todavía hoy el altar mayor de la iglesia del Hospital y que albergaba la talla de madera policromada de Cristo Resucitado que se encargó posteriormente y que también forma parte de la colección Medinaceli.